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Mostrando las entradas etiquetadas como sexo

Sexo y Matrimonio (3a de 3): ¿Somos compatibles?

Hoy cierro un nuevo bloque en los temas que me propuse escribir relacionados con el matrimonio. En particular, el tema de sexo me resultó complejo y la literatura relacionada abundante. Por ello desde el inicio decidí acotarlo a tres ideas y con la compatibilidad sexual (o falta de esta) doy por completado mi objetivo. Para abrir boca, les comparto una idea que leí y me dejó profundamente marcado: hay una estrecha relación de la compatibilidad sexual con la madurez y profundidad de la relación conyugal. Pero todo tiene un principio. Y en el caso de la relación sexual, existe sin duda una etapa de Adaptación Inicial . Un esfuerzo para adquirir la capacidad de ajustarse a las preferencias o características del cónyuge en el sexo. La etapa de adaptación puede ser difícil, e incluso prolongarse más de lo que alguno de los miembros de la pareja (o ambos) desean cuando impera la ignorancia, la falta de disposición para ser sensible a la persona con la que compartes la cama y por la incapacid...

Sexo y Matrimonio (2° de 3): ¿Hasta que el cuerpo nos separe?

V ivimos una era maravillosa en muchos ámbitos. Especialmente gozamos de condiciones tecnológicas y médicas que envidiarían nuestros congéneres de otras épocas. La ciencia nos da la posibilidad de cuidar nuestro cuerpo de una forma que pocos años atrás sería considerada ciencia ficción. Es quizá esto último lo que nos ha llevado a darle un valor a lo físico, que ha desplazado de forma evidente a las características internas de la persona humana en el contexto de las relaciones y que, especialmente en materia sexual, nos ha llevado a sobredimensionar un aspecto de la relación conyugal que si bien es importante, no tiene porqué ser el más. La American Psychological Association publicó un estudio sobre la sexualización de las niñas, cuyas ideas fundamentales (que a continuación compartiré), son, como el mismo estudio lo dice, aplicables a la persona, indistintamente del sexo o la edad. La “cosificación del sexo” se facilita cuando: El valor de una persona deriva únicamente ...

Sexo y Matrimonio (1° de 3): ¿El fin último?

C omo lo esbocé la semana pasada, hoy empiezo una serie de tres artículos con los que quiero desarrollar algunas ideas relacionadas con el sexo en el contexto de la relación conyugal. La primera de mis tres publicaciones en este ámbito tiene como idea central explicar porqué pienso que el acto sexual no es el fin último de una relación de pareja, sino una de las diversas herramientas para el perfeccionamiento de la misma y como esta idea colabora en la construcción de una relación humana satisfactoria y duradera. De entrada, creo importante establecer una distinción entre persona y objeto. Un objeto es una cosa que podemos percibir por algún sentido y sobre la que se puede accionar y carece de autonomía de acción. La persona es definida como un ser racional y consciente de sí mismo, poseedor de una identidad propia. En Psicología: Persona designa a un individuo humano concreto, abarcando tanto sus aspectos físicos como psíquicos para definir su carácter singular y único . ¿Por qué inic...

Sexo y Matrimonio

La literatura relacionada con el matrimonio aborda desde diversos enfoques y con distintos grados de profundidad el tema del sexo. Una idea en la que casi todos parecen coincidir, es en que no es factible entender al hombre y en especial, al hombre en el contexto de sus relaciones con los demás, sin darle valor a la estrecha unión de lo emocional y lo fisiológico. Es difícil sustraerse a las conexiones que existen entre lo que nuestro cerebro procesa producto de las vivencias cotidianas y las reacciones que se producen en nuestro cuerpo. Esto último es un rasgo distintivo de nuestra compleja naturaleza humana. Somos capaces de procesar las emociones de una manera que va más allá de las meras reacciones instintivas que compartimos con el reino animal. Particularmente, los aspectos de nuestra vida relacionados con la sexualidad son mucho más que la manifestación de un impulso primitivo o elemental; son reflejo de nuestra falta de capacidad para vivir la soledad, nuestro gusto por el cont...